Historia

Las primeras décadas del siglo XX fueron muy ricas en audaces avances médicos impuestos por el gran número de heridos en los frentes de guerra. Tanto los médicos de campo como los de los hospitales de toda Europa tuvieron que recurrir a improvisar técnicas de sutura y aplicar medicamentos no convencionales en la urgencia de salvar vidas.

A partir de esta necesidad surgieron innovaciones como los trasplantes de tejidos, tratamientos para infecciones, cuidado de quemaduras, técnicas de fijación de fracturas y métodos quirúrgicos sin precedentes en ese momento. Esto impulsó la búsqueda de tratamientos tradicionales en busca de la cura para las grandes enfermedades de la humanidad. Fue en este entorno que la figura pionera del Dr. Alexis Carrel (1873 - 1944), un médico francés e investigador práctico profundo de trasplantes de tejidos, desarrolló innovaciones específicas para tejidos vasculares y cardíacos. Fue galardonado con el Premio Nobel de Medicina en 1912 por sus innovadoras técnicas de sutura vascular, desarrolladas para tejidos vasculares y cardíacos.

Influenciado por el trabajo del Dr. Alexis Carrel, el médico suizo nacido en 1931, realizó el primer trasplante de extractos de células de origen ovino en un paciente de 57 años casi sin esperanzas. Además de recuperar su salud, esta persona vivió 27 años más. También está el caso del Papa Pío XII, quien en 1953 añadiría gran prestigio cuando, enfermo y casi al borde de la muerte, fue tratado por el Dr. Niehans con los mismos principios terapéuticos celulares, salvándole la vida. Desafortunadamente, debido a los altos costos de manipulación y preparación de sus fórmulas, solo se beneficiaron pacientes de alto poder adquisitivo, como dignatarios, políticos y personas famosas.

En 1956, la práctica de estos tratamientos había ganado notoriedad en la comunidad médica europea, donde se comenzaron a fabricar productos basados en inyecciones de origen opoterapéutico en Heidelberg, Alemania, y se promocionaron como TERAPIAS CELULARES. En 1957, El Instituto de Investigación Biológica Biocell Ultravital en Suiza fue uno de los primeros laboratorios en desarrollar tratamientos con extractos opoterapéuticos liofilizados. Con el tiempo, los resultados revitalizantes que proporcionaron fueron ampliamente aceptados, al punto de que el propio Dr. Paul Niehans y diferentes clínicas en Europa comenzaron a recetarlos a sus pacientes.

Las Terapias Celulares han avanzado enormemente gracias al Dr. Joseph Wagmann, Director Científico del Laboratorio Industrial de Biología (actualmente Biocell Ultravital de Francia). En 1969, el Dr. Wagmann desarrolló nuevas fórmulas utilizando métodos en biotecnología para la producción de productos basados en opoterapia, incorporando enzimas y otros componentes naturales, lo que condujo a alternativas viables clínicamente probadas a medicamentos, esteroides u otras sustancias de origen químico que representaban un riesgo para la salud.

A lo largo de todos estos años de experiencia, el Dr. Wagmann ha dejado un legado que nos permite mejorar nuestras fórmulas, centrándonos principalmente en optimizar la energía en las células y fortalecer el sistema inmunológico.

La Terapia de Renovación Celular de Biocell Ultravital nació y mantiene sus raíces suizas en la ciudad de Lucerna, donde se administran únicamente los derechos de patente y marca registrada a nivel mundial. La fabricación y el desarrollo científico se llevan a cabo en Biocell Ultravital en Francia y Alemania, junto con laboratorios asociados en los Países Bajos y los Estados Unidos. Las Terapias de Renovación Celular son tratamientos que tienen principalmente un enfoque preventivo, pero también son excelentes adyuvantes de los tratamientos convencionales al proporcionar los nutrientes importantes para las células. Estas terapias también proporcionan inductores específicos a través de tejidos embrionarios organoterapéuticos, fitoorgánicos, enzimas, aminoácidos, potentes antioxidantes y otras sustancias no químicas reconocidas por brindar acciones terapéuticas que estimulan la revitalización y la regeneración celular. Su objetivo fundamental es revitalizar los órganos optimizando la función de los tejidos para evitar posibles cambios estructurales, especialmente para aquellos predispuestos por la genética o la herencia biológica. En resumen, estamos honrados de incluir el legado del Dr. Escardó al revivir su lema científico: "Siempre hay una medicina, y es la que cura". Esta importante referencia histórica sirve como inspiración para informar a la comunidad médica internacional y al público en general sobre la incorporación de nuevos componentes biológicos en las fórmulas de nuestros productos, con el propósito de mejorar su efecto terapéutico. Estos componentes forman parte de la nueva gama de tratamientos, nuestra 4ª Generación, para revitalizar y renovar la función celular, consolidando aún más la era de la medicina preventiva y regenerativa.